En el corazón del proyecto están los nudos. El nudo es una figura liminar: un objeto concreto que puede ser analizado con rigor desde las matemáticas, pero que también se presta a múltiples interpretaciones simbólicas y sensibles -son puntos de convergencia metafóricos: relaciones, afectos, corporalidad-. En la teoría de nudos, rama de la topología, los nudos son clasificados, comparados y manipulados a través de conceptos como invariantes, enlaces, entrelazamientos y transformaciones espaciales.
Estos estudios tienen aplicaciones en biología molecular, física cuántica y teoría de redes, pero también en abstracciones puramente formales: un nudo "existe" más allá del material del que está hecho.
Desde el arte y la poesía, el nudo es también una posibilidad. No sólo como forma visual o como gesto manual, sino como estructura del pensamiento y del lenguaje: enredar, tensar, soltar, atar, aflojar, cuidar, sostener. El nudo como relato. Como vínculo. Como forma de hablar sobre afectos.